LA COMADRONA. KATJA KETTU

La comadrona de Katja Kettu

Traducción de Dulce Fernández Anguita

Editorial Alfaguara

416 páginas

MI OPINIÓN

Desde que leí la reseña de Maria del blog De todo un poco supe que tenía que leer esta novela, una historia cruenta que me dejó tocada como hacía mucho que un libro no lo conseguía.

La narración se sitúa en Finlandia, país aliado de la Alemania nazi de la Segunda Guerra Mundial. Allí asistiremos a los últimos coletazos de una larga guerra y a la retirada de los alemanes desde El Fiordo del Hombre Muerto, donde la comadrona decide esperar a su gran amor, el fotógrafo y oficial de las SS Johannes.

El libro narrado a tres voces, nos permite asistir a la historia de amor desde la perspectiva de sus dos protagonistas, la comadrona y Johannes, a las que se le une, en forma de cartas, la del padre de la chica que nos dará perspectiva y profundidad sobre el pasado y la acción que subyace a la historia principal.

No nos encontramos en La comadrona la típica historia de amor imposible durante una gran guerra. Es mucho más. Nunca había leído algo parecido. La historia se mueve entre lo desgarrador, llegando incluso a mostrar el lado más desagradable del ser humano, y lo profundo, provocando una sensación de desasosiego que obliga a veces a parar para reponerte y coger aire.

Katja nos traslada a un paraje inhóspito donde nos muestra una historia de amor cruda, desnuda, sin artificios. Dolorosa. Y nos enseña lo que el ser humano es capaz de hacer no solo en un conflicto bélico sino también por amor, donde el fin también justifica los medios en esta novela.

Los personajes están muy bien dibujados en su totalidad, puesto que el libro cuenta con unos secundarios de lujo. La autora no necesita de muchas líneas para sumergirnos en la personalidad de cada uno y hacernos una composición de los mismos. Todos ellos tiene una función propia en el relato que se nos irá descubriendo poco a poco.

En cuanto al estilo de Katja Kettu es duro, seco, preciso, no da tregua en las sensaciones que causa. Va encadenando párrafos en los que golpea en la boca del estómago hasta que tienes que parar para coger fuerzas. No despierta gran simpatía por los protagonistas, pero no se explicar como, consiguió que me resultaran hipnóticos, porque a pesar de no entenderles, no pude dejar de avanzar para saber el final de esa historia de amor casi primitiva que surgió en el peor momento posible.

En definitiva una historia desgarradora que cerré con la sensación de haber leído un libro que permanecerá en mi memoria. Así ha sido. Hay que leerlo.

Besos 

"9 de junio de 1944

Querida hija:

Espero que me perdones. estoy contemplando la mar desde una roca, en la misma hondonada desde la que vi las ballenas por primera vez. De eso hace ya cuatro años, dos meses y cinco días. Llegaron al fiordo deslizándose como islas grandes y juguetonas. Esa noche cantaron hasta que me dormí. Mis sueños han sido más reales en este lugar que el velo de bruma que sutilmente flota durante el día. En ellos me espera tu madre, con su hermoso cuello blanco, la única mujer  a la que he amado en mi vida."