UN HOTEL EN NINGUNA PARTE. MÓNICA GUTIERREZ

Un hotel en ninguna parte de Mónica Gutierrez

Autoeditado

186 páginas

MI OPINIÓN

Cuando leí el primer libro de Mónica, "Cuéntame una noctalia" lo disfruté muchísimo, me pareció un libro con una historia entrañable y muy bien contada. Por eso cuando sacó su segundo libro y me enteré vía twitter no dudé en hacerme con él.

He de decir que no se si voy a ser muy objetiva, leí Un hotel en ninguna parte en un muy mal momento, y fue curativo. Por eso, a este libro no solo le tengo que agradecer su historia, y lo que me gustó si no también que llegara en el momento más adecuado.

Lo mismo le ocurre a nuestra protagonista, Emma recibe la oferta de trabajo de El Bosc de les fades en el momento más necesario, cuando su vida se encuentra un tanto a la deriva. 

Allí encontrará una serie de personajes que le ayudarán a encontrarse de nuevo consigo misma y que a su vez llegarán al lector.

El libro esta escrito a base de los emails que los tres protagonistas principales mandan. Emma a su mejor amiga Anna, y Tristán y Samuel a su madre. A través de ellos se nos dará a conocer la historia del hotel y sus habitantes, así como el día a día de los huéspedes.

Lo que más me ha gustado es que a pesar de las pocas páginas de la novela, los personajes están completamente perfilados, sobretodo nos damos cuenta en los tres que escriben los emails, de hecho Mónica los ha dotado de una personalidad especial a cada uno que se ve reflejada en la manera de redactar las misivas. Especialmente original me han parecido las entradillas de los emails de Emma, donde se nos da una serie de piezas de música, ideales para ir acompañando la trama.

Dentro de la novela nos volvemos a encontrar una historia de amor que me ha vuelto a sorprender. Creo que lo he contado alguna vez, normalmente las historias de amor me parecen insustanciales, y poco creíbles, pero Mónica me convence con las suyas. No sabría decir que tienen, pero son bonitas sin llegar a ser cargantes y demasiado edulcoradas. No parecen forzadas, sino que se dibujan con mucha naturalidad.

En definitiva, una novela de lo más recomendable; no tiene absolutamente nada que envidiar a las publicadas por editoriales. Las sensaciones con las que te deja son muy positivas. Tanto que te da una pena enorme abandonar El Bosc de les fades porque lo haces con una sonrisa y totalmente agradecida a los personajes que te han acompañado en la travesía. Sabes que querrás volver.

Un hotel en ninguna parte vuelve a ser, al igual que su predecesora, alimento para el alma.

Besos