Las posesiones de Llucia Ramis
Libros del asteroide
261 páginas
MI OPINIÓN
Parece mentira como en una novela de pérdidas, puedes encontrar tantas cosas. Lo que también parece mentira son los libros tan buenos con los que me estoy tropezando este 2018. Ojalá no se tuerza. Hoy os traigo Las posesiones de Llucia Ramis, que ha recibido el premio de novela en catalán Llibres Anagrama, cuya traducción al castellano le debemos agradecer a Libros del Asteroide.
Crecer puede resultar muy doloroso, alejarte de los sitios que te han visto nacer, evolucionar, y encontrarlos distintos, como si ya no fueran tuyos, saber que ya no hay un sitio al que volver, puede cubrirnos de desasosiego. Esto es lo que le pasa a la protagonista de Las posesiones. La conocemos en u viaje de emergencia a Mallorca, la isla en la que vivió hasta que se mudó a Barcelona para ejercer el periodismo. Es un viaje complicado puesto que debe volver a Palma porque su padre parece haberse vuelto loco. Esta viviendo una de las crisis más complicadas de su vida y va por el mundo como un Quijote del s. XXI tratando de luchar a pecho descubierto contra las injusticias. Allí se dará cuenta de que crecer también supone ver a tus padres como son en realidad, con todos sus defectos, desprovistos de ese aura de super héroes que nos acompaña en nuestra infancia.
Pero la isla es también Marcel. Su gran amor. Ese que a pesar de no haber querido comprometerse nunca con ella ha quedado como un soplo de corazón. Esta ahí, no duele, pero mejor cuidarse de él. Nunca lo olvidará, y saberlo ya supone todo un alivio. Iván, su pareja actual, lo ha intentado, y ella también le ha puesto esfuerzo, pero hay cosas que sólo salen de manera natural y fluida con determinadas personas, por mucho que nos empeñemos en lo contrario.
Volver a Palma también supone desempolvar ciertos recuerdos difusos y dolorosos, el momento en que el socio de su abuelo, mató a su mujer y a su hijo para después, suicidarse él. Un acontecimiento que marcará un antes y un después en la vida de su familia y que se convertirá en una mochila que arrastrarán siempre consigo.
Las posesiones trata también del problema del periodismo, la falta de información veraz, la fiebre del titular y del aquí y ahora. Toda la caída al abismo de la profesión y cómo, aun así, se mete debajo de la piel del que tiene vocación y no le suelta nunca.
La novela habla de la pérdida, de la unión con la tierra, con la posessió, el sentirnos parte de algo, de alguien, de la necesidad de tener anclajes, de tener donde regresar, del pasado, pero sobre todo Llucia Ramis nos hace entender entre risas nada forzadas y párrafos para enmarcar con un cierto deje muy intimista que también somos lo que hemos perdido. Desaprovechamos muchas cosas, pero por favor, no dejéis escapar este libro.
Besos
Pues tiene muy buena pinta. No me importaria leerlo.
ResponderEliminarNo lo conocía de nada y el tema que trata, bueno más bien temas, desde el regresar, el ver a tus padres como realmente son o a cerrar temas del pasado me ha gustado mucho
ResponderEliminarUn beso!
Yo tampoco lo conocía, habrá que darle una oportunidad.
ResponderEliminarBesos
No he leído nada de Llucía Ramis, pero sí que he visto muy buenas críticas de este libro. Me gusta lo que nos cuentas y me ha sorprendido el tema del periodismo, que me toca muy de cerca y me hace que esta lectura todavía me tiente más. Me la la llevo. Me ha encantado tu reseña. Un beso.
ResponderEliminarUis qué casualidad. Acabo de leer una entrada en un blog sobre el periodismo y ahora me encuentro con esta novela. La verdad es que no me sonaba de nada pero tiene buena pinta, es de las que me pueden gustar. La tendré en cuenta. Besos
ResponderEliminarJo, me he quedado ya como triste al leer tu reseña. No dudo de que me gustaría pero no en este momento, de eso estoy segura.
ResponderEliminarUn beso
Se nota todo lo que te ha gustado. Gracias por la recomendación. Besos.
ResponderEliminarMe lo llevo apuntado =)
ResponderEliminarBesotes
Pues no conocía este libro. Y me ha llamado mucho la atención.
ResponderEliminarBesotes!!!
Lo he tenido en la mano alguna vez y me quedo siempre indecisa. Me lopensaré mejor la próxima visita a la libre
ResponderEliminarBesos
Ay, Carla, qué reseña más preciosa. Tenía mucha curiosidad con este libro y no has podido ser más clara en tu opinión. No me cabe duda que la disfrutaría. De hecho, me la llevo con mayúsculas.
ResponderEliminarBesos
Me gusta lo que nos cuentas en esta reseña. La leería, si tuviese oportunidad: tu magnífica reseña invita a ello. Besos.
ResponderEliminarMe lo llevo, me has convencido. A ver cuándo y cómo le haga hueco.
ResponderEliminarBesos.
Joerrrr, no sé qué hacer. Me ha encantado todo lo que has contado, porque últimamente estoy yo de novela intimista, de sufrir, y esta parece tener mucho de eso. Pero, ¿Asteroide? Me he llevado tanto chafón con esta editorial....
ResponderEliminarMuero de envidia de esta suerte de lecturas en 2018. El mío está siendo bastante más mierdusco.
Besos.
No me terminó de decidir con este libro, ni con la autora. Le daré un par de vueltas.
ResponderEliminarUn beso ;)
Pues me llama por un lado, pero por otro no sé. Creo que esperaré a decidir. Un besote!!
ResponderEliminarMe lo apunto y lo buscaré. Después de leer tu reseña quien no lo hace???
ResponderEliminarBs.