El cielo es azul, la tierra blanca de Hiromi Kawakami
Acantilado
211 páginas
MI OPINIÓN
El cielo es azul, la tierra blanca bien podría ser uno de esos haikus tan presentes en la novela, esos poemas cortos japoneses que, a pesar de su brevedad, encierran grandes significados elevado lo cotidiano a un momento mágico.
Tsukiko es una mujer de 38 años con una vida monótona, algo triste y poco convencional si atendemos a los estándares de la mujer japonesa. No ha tenido mucha suerte en el amor, pero será ella misma la encargada de narrarnos su gran historia de amor con su antiguo profesor de japonés Harutsuna Matsumoto. Irónicamente ella le llamará maestro pues al no recordar su nombre la primera vez que se reencuentran en una taberna, decidirá salvar la situación utilizando ese apelativo. Matsumoto es una persona culta, solitaria que ha sido abandonado por su mujer hace tiempo y que a partir de un encuentro fortuito, empezará a conversar con Tsukiko, a comer juntos y a beber cerveza sake, estableciendo un vínculo especial con ella.
El cielo es azul, la tierra blanca es de esos libros sencillos de leer pero que a la vez tienen una profundidad especial, supongo que a cada lector le dejará un poso diferente, a mi me ha parecido un libro sobre la soledad, sobre la necesidad que tenemos del otro, una historia de amor lenta, verdadera y que a mi me ha resultado de una nostalgia terrible. Me ha parecido un libro con cierto halo de tristeza y que me ha dejado como cuando miro ciertos cuadros impresionistas, solitarios, bellos y naturales, con esa sensación de tener un pellizco cojido en el estómago.
Se lee muy fácil, pero necesita su tiempo. No te acerques a él si quieres encontrar una historia palpitante o una trama de un amor lleno de pasión y tópicos de algunas novelas románticas. Sin embargo, si lo tuyo son las historias reales, cocidas a fuego lento y que se toman su tiempo, El cielo es azul, la tierra blanca es tu libro.
Besos
Uy este no es para mí. Veo que te ha llegado pero a mí la literatura oriental me suele dejar fria.
ResponderEliminar7n beso
Ya sabes que me encantó y tu opinión refleja muy bien lo que sentí durante y después de su lectura.
ResponderEliminarBesos.
A mi la literatura oriental me gusta mucho pero esta no me llama especialmente, me deja algo indiferente la verdad
ResponderEliminarUn beso!
Tengo ganas de leerlo =)
ResponderEliminarBesotes
No tengo muy claro que este libro sea para mi. Besos.
ResponderEliminarHola!una propuesta muy curiosa e interesante nos deja la visita a tu blog.es diferente y eso nos llama la atención! Gracias por atreverte a eso.saludosbuhos
ResponderEliminarPor favor. Palabras mayores. Belleza zen, soledad y devastación. Abandono, destino. Todo eso, me quedo corto. Un lujo.
ResponderEliminarPues aunque ahora no ando yo para demasiadas nostalgias y soledades, me gusta lo que dices sobre esa historia real, sobre su profundidad, sobre el tiempo... Creo que la anoto para un mejor estado de ánimo. Abrazos.
ResponderEliminarHace años que no leo nada de autores orientales y eso que me suelen gustar mucho. Creo que todos coinciden en los mismo y es que son historias para disfrutarlas lentamente.
ResponderEliminarMe lo apunto
Un saludo
Yo estoy en otro momento literario. Me gusta cambiar un poco pero no es el mejor momento para meterme en una historia como esta. Besos
ResponderEliminarA mi este libro me encantó, lo he leído ya un par de veces y lo he regalado otro par. Es, como dices, una historia sosegada
ResponderEliminarBesos
Ay, qué bonitooooo. Me lo regaló la que escribe aquí arriba en edición de Alfaguara y tengo muchas ganas de leerlo, porque cada vez me gusta más el ritmo de la novela oriental.
ResponderEliminarBEsos.
Por lo que now cuentas an tu Cesena no me atrae esta novels. Besos.
ResponderEliminarA mí no me llegó. Ni me parecieron los diálogos creébles, ni me llegó la historia ni nada. Las partes en las que los protagonistas comen me llegó a dar grima, y para que a mí me pase eso... XD Me alegro de que tú sí la hayas disfrutado. Un besote!
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