La librería del Señor Livingstone de Mónica Gutiérrez
Autopublicado
236 páginas
MI OPINIÓN
Terminar el año con dos cinco estrellas es terminarlo por todo lo alto, y esto se lo debo a sus dos escritoras y, especialmente, a Mónica, no sólo por escribir La librería del Señor Livingstone sino también por recomendarnos a Teresa de Leyendo en el bus y a mí que la çepoca navideña era lña más propicia para acercarse a él. ¡Y vaya si lo fue!
La librería del Señor Livingstone es una historia sobre pequeñas cosas, sobre vidas corrientes y anhelantes como la de Agnes una joven española que enamorada de los descubrimientos arqueológicos decide viajar a Londres donde cree que las oportunidades de poder trabajar en lo suyo y acabar entre las paredes de un museo serán mayores que aquí. Sin embargo las cosas tampoco se le ponen fácil y un día de lluvia recalará en la librería del Señor Livingstone, descendiente de David Livingstone el famoso explorador descubridor de las cataratas Victoria y cuya vida apasiona a Agnes.
Edward Livingstone es el dueño de Moonlight Books, una encantadora librería del barrio del Temple y que se caracteriza por su humor e ironía punzantes y por ser una viejo gruñón encantador dedicado en cuerpo y alma a su pequeño negocio y sus lectores. Su gran descubrimiento será la propia Agnes, que empezará a formar parte del pequeño universo del librero, sin saber, que desde ese momento, su vida va a cambiar irremediablemente.
Leer a Mónica siempre es un placer, porque ella no escribe, ella crea lugares en los que te quedarías a vivir, de hecho, durante la lectura Teresa y yo estuvimos de acuerdo que debería abrir en la realidad esos sitios tan maravillosos sobre los que escribe, tendría dos clientes fijas.
Una de las cosas que más me gusta de los libros de Mónica es esa sensación tan cálida y agradable que sientes mientras la estás leyendo y que perdura cuando cierras el libro. Es una sensación parecida a sentirse a salvo, que vives en un mundo en el que sigue existiendo la magia de lo cotidiano y en el que todo es posible. La librería del Señor Livingstone es ese abrazo de una amiga mientras te susurra que todo saldrá bien.
No hubo mejor forma de terminar 2017. A la espera de todo lo que decida publicar Mónica que, espero, sea mucho.
Besos